Trivia 2° Medio
Nombre: Balsa de la Medusa
Autor: Theódore Gericault
La Balsa de la Medusa (Francés: Le Radeau de la Méduse) es una pintura al óleo hecha por el pintor y litógrafo francés del Romanticismo, Théodore Géricault
entre 1818 y 1819. La pintura se terminó cuando el artista tenía
únicamente 27 años, el trabajo se convirtió en un icono del
Romanticismo francés. Es una pintura de formato grande (491 cm × 716
cm),
[1] La Balsa de la Medusa representa un momento de las consecuencias del naufragio de la fragata de la marina francesa Méduse, que encalló frente a la costa de Mauritania el 5 de julio de 1816.
Por lo menos 147 personas quedaron a la deriva en una balsa construida
apresuradamente, pero al menos 15 de ellas murieron 13 días antes de su
rescate y las que sobrevivieron soportaron el hambre, la deshidratación, el canibalismo y la locura.
El evento llegó a ser un escándalo internacional, en parte porque sus
causas fueron atribuidas a la incompetencia del capitán francés
actuando bajo la autoridad de la reciente y restaurada Monarquía francesa.
Al seleccionar esa tragedia como el tema de su primer trabajo
importante —una descripción (la cual no le fue encargada) de un evento
reciente en esa época— Géricault conscientemente seleccionó un
incidente muy conocido que pudiera generar un gran interés público y al
mismo tiempo que pudiera ayudarlo a comenzar su carrera.
[2]El evento en sí fascinó al artista, y antes de comenzar a trabajar en
la pintura final, emprendió una investigación intensa y produjo muchos
bocetos preparativos. Entrevistó a dos de los sobrevivientes, y
construyó un modelo detallado a escala de la balsa. Su empeño le llevó
a ir a morgues y hospitales donde pudiera ver de primera mano el color
y la textura de la carne de las personas agonizantes y de las que
estaban muertas. Como el artista había anticipado, la pintura probó ser
altamente polémica en su primera exhibición en el Salón de París
de 1819, atrayendo elogios apasionados y condenas por igual. No
obstante, esto estableció su reputación internacional, y hasta nuestros
días (año 2010) es visto ampliamente como seminal
[3] en la historia temprana del movimiento romanticista en la pintura francesa.
Aunque La Balsa de la Medusa mantiene elementos de las tradiciones de la pintura histórica,
tanto la elección del tema de la pintura como su dramática
presentación, representan un rompimiento con respecto a la calma y
orden de la escuela neoclasicista
entonces prevalente. El trabajo de Géricault atrajo la atención casi de
inmediato a partir de su primera muestra, y a la subsiguiente
exhibición en Londres. Fue adquirida por el Louvre
poco tiempo después de la muerte prematura del artista a los 32 años de
edad. La influencia de la pintura puede ser vista en los trabajos de Eugène Delacroix, J. M. W. Turner, Gustave Courbet y Édouard Manet.
La pintura no tiene simetría, sino que presenta más bien un desorden
intencionado acorde con el tema representado. Varias líneas directrices
(una de ellas la principal), dos planos (primero la balsa y de fondo el
paisaje), en definitiva, una estructura piramidal sobre una base
inestable (el mar).
Una línea parte del cadáver de la izquierda con las piernas en el
agua y asciende hasta el marino que agita un trapo en dirección al
barco que acude al rescate. La disposición se ajusta a la realidad
histórica: los 15 náufragos de la balsa de la Méduse fueron rescatados por el Argus.
El sentido ascendente de la línea marca la sucesión de sentimientos
experimentados por los náufragos, desde la desesperación a la
esperanza. También la luz refuerza esta idea de final de la odisea con
las nubes más negras a la izquierda, y el cielo más luminoso en la
lejanía y recortándose entre las cabezas de los marinos más destacados.
Finalmente, se corresponde con la mirada clásica del espectador
occidental, que "lee" la pintura de izquierda a derecha.
Géricault ha reducido considerablemente el tamaño del barco
rescatador en su pintura, hasta el punto que lo representa como un
pequeño punto apenas sugerido en el horizonte. Si observamos la vela de
la balsa, nos damos cuenta de que el viento sopla en una dirección que
no acerca precisamente la balsa al barco: hacia la izquierda, en
sentido contrario al de la lectura; podríamos decir que simbólicamente
el viento sopla hacia la muerte. Además tiene un efecto negativo sobre
el equilibrio de fuerzas de la escena.
Perspectiva: No hay punto de fuga, ya que las otras dos bordas de la balsa están ocultas por los personajes que se encuentran en ella. El encuadre es frontal.
Tipo de espacio: espacio "teatral", compuesto (los personajes
están dispuestos formando una curva que se dirige a la esquina superior
derecha del lienzo).
Colores: La paleta es muy reducida, va del beis al negro pasando por los tonos pardos
claros y oscuros. Consigue, de este modo, una atmósfera de tonos
cálidos con colores armonizados que produce una impresión dramática de
angustia y desamparo. El color dominante es el beis oscuro y apagado.
Sin embargo, existe un elemento que se destaca del resto por su color:
se trata de la estola rojiza que lleva el anciano que sujeta un cadáver
con la mano, en la parte izquierda inferior del cuadro.
Pincelada: El romanticismo se caracteriza por una pincelada suelta y unos contornos imprecisos, como es el caso de este lienzo.
Luis Hernán Arenas Vega
2° Medio A