Apologia
santiaguina de la palma chilena
Paisaje de los palmares de Cocalán, por el artista Onofre
Jarpa.
La palma chilena, o Jubaea chilensis
de los científicos, tiene varias particularidades estéticas y biológicas que
observaron Molina y otros estudiosos chilenos, y que la hacen única en varios
sentidos. La especie es endémica de la Zona Central de Chile, entre los 32° S y 35° S,
particularmente del sector mediterráneo, hacia el interior. Los indígenas le
llamaban Kan-Kan y le dieron varios usos. Hallazgos de polen fosilizado
confirman su aparición en el territorio, cuanto menos, en el período Terciario.
Es decir, ya era "chilena" en el Cenozoico, unos 65 millones antes de
nacer Chile.
Quizás lo más característico de ella sea
su tronco grueso, más bien liso y con aspecto de columna gris de estilo dórico,
pues tiene la tendencia a estrecharse en la base y aún más notoriamente hacia
el extremo superior, careciendo del "capitel" de ramas romas que es
típico de la mayoría de las demás palmas. Es el esfuerzo que la planta realiza
al producir sus frutos lo que marca tan notorio estrechamiento del tronco,
desde un punto de su altura hacia arriba. Sólo florece después de unos 50 años
de vida. También es una de las palmáceas más longevas, pues se tienen registros
de palmas chilenas con más de mil años.
Se la puede hallar naturalmente desde la
zona Sur de Coquimbo hasta el río Maule, pero es en la Región de Valparaíso donde
con más abundancia se concentra, especialmente en el Parque Nacional del Cerro la Campana, en la Hacienda del Cocalán, en
los Palmares de El Salto y en Ocoa, siendo algunas de ellas las principales
reservas por siglos ya. Se la reconoce también como la especie más sureña de
todas las palmáceas después de la nikán (Rhopalostylis sapida, de Nueva Zelandia),
llegando a tolerar fríos de -15º. La más austral de la que se tiene registro
estaría en la ciudad de Frutillar, y fue plantada allí, junto al Llanquihue,
con propósitos ornamentales. Sus raíces son un tanto dispersas y carentes de un
ápice principal, pero pueden extenderse hasta 15 metros.